ALIMENTATE SANAMENTE PARA SALIR A CAMINAR
No debemos salir a caminar durante mucho tiempo con el estómago vacío ni demasiado lleno. Debemos dejar transcurrir al menos un par de horas después de una comida abundante. Tampoco es aconsejable el consumo de alcohol o bebidas excitantes.
Lo ideal es tomar un pequeño tentempié antes de salir: Avena, una porción de pastel, un bocadillo o fruta fresca, es decir, carbohidratos, que son los que aportan más energía junto con los glúcidos.
Por otro lado, podemos llevar encima un tentempié (por ejemplo, frutos secos) con gran poder energético y fácil de comer al aire libre. Debemos evitar los alimentos muy azucarados, no sólo porque provocan sed, sino porque el azúcar genera una producción de insulina y una inmediata sensación de energía que es seguida por un bajón aún más intenso. Estas subidas de insulina no son beneficiosas ni para nuestro rendimiento ni para nuestra salud.
Después de caminar sentiremos hambre y sed: debemos beber lo antes posible y después tomar una buena fuente de carbohidratos: un plato de pasta o arroz, o algo más rápido, como un yogur con fruta fresca.
También es muy importante hidratar el organismo. Debemos beber antes y durante el ejercicio; sobre todo si vamos a realizarlo durante un tiempo prolongado y/o hace calor, pero también cuando lo hayamos acabado. Aunque el agua es la mejor opción (siempre que no esté helada), también resultan muy beneficiosas las infusiones, que preparadas en poca agua y bien escurridas ayudan a recuperar los electrolitos perdidos.